El alumno de Sonido, Daniel Aznar, parte del equipo de La Isla de las Tentaciones
Un alumno de Sonido está trabajando en… ¡La Isla de las Tentaciones!
Y más de una persona se estará preguntando: ‘¿Y cómo ha llegado hasta uno de los programas más vistos de los últimos tiempos de la televisión como lo es La Isla de las Tentaciones?’. Pues bien, de la forma en la que llegan las cosas: a base de currar, currar y currar. Y es que, como nos cuenta Daniel Aznar: “he llegado hasta aquí por no decir que no a ningún trabajo. Siempre que me ha aparecido la oportunidad, tanto a nivel laboral como profesional, he aceptado. He cogido todas las oportunidades que han surgido para conseguir tanto experiencia como contactos, sin apenas tener un descanso”.
De hecho, ha rodado una webserie, un documental, varios spots para asociaciones y ONG´s de Zaragoza y media docena de cortometrajes. Algunas de estas experiencias pertenecen a su etapa de estudiante en CPA, y otras fuera. Y un día “me llegó la oportunidad de trabajar en una publicidad para Balay, a la cual me apunté de cabeza. Tuve la suerte de coincidir con un equipo de profesionales de más de 30 técnicos, realizadores, dirección, producción, eléctricos, cámaras… Y entre todos ellos, se encontraba el técnico de Sonido para el que yo hice de auxiliar”.
Como suele ocurrir, gracias a esta experiencia y su gran relación laboral y personal con este compañero en concreto, ¡le surgieron nuevas experiencias!
“Un año después, él terminó trabajando como jefe de sonido de La Isla de las Tentaciones, y pensó en mí”. ¡Y no será por falta de técnicos de sonido en España! Así que justo cuando una sonidista que había puesto el equipo de producción del programa cayó, se puso en contacto con Daniel, ¡que aceptó sin pensárselo!
Una experiencia profesional única e inigualable en el paraíso
En una semana, Daniel se embarcó en un proyecto impresionante en el que “trabajamos un equipo de 60 personas. Estoy aquí con grandes técnicos, cámaras, realizadores y productores, que participan en la mayoría de programas que llenan la televisión; desde otros realities, a programas como Sálvame, La resistencia, Pekín Express, y que incluso han rodado entrevistas a gente de alto standing de la sociedad”.
Y no sólo aprende de estos profesionales a nivel técnico, sino a nivel social. Y es que le cuentan cómo es el mundo de este tipo de shows detrás de las cámaras.
Como es de esperar, “el trabajo no es fácil. Son muchas horas al sol en un país donde la humedad está al 90%, y los mosquitos te aman, como un niño un caramelo”. Y además, “la responsabilidad es total, ya que, si el material que yo grabo no sale correctamente o se pierde, es contenido que no puede emitirse y habría que repetirlo”. Ante lo que se pierde la naturalidad del formato reality.
Lo chulo de este trabajo, y él mismo lo recalca, es que “cada día es una aventura nueva”. Trabajan al día y la responsabilidad y esfuerzo no puede bajar en ningún momento. Pero, como también cabe esperar, no todo es trabajo y responsabilidad. Al finalizar la jornada, vuelven a un resort de 4 estrellas en el que pueden relajarse de lo lindo. Tiene piscina a pie de playa, varios restaurantes de buffet, chiringuitos en la playa, discoteca, gimnasio y spa… ¡Todo incluido en el paraíso!
Su próximo proyecto, en cuanto vuelva a la capital maña y el programa se haya emitido, será venir a CPA a dar una charla a estudiantes del Grado Superior de Sonido para contarles su experiencia y, ya de paso, compartir algún que otro cotilleo con todos nosotros.